A lo que en principio era un viaje de amigos y diversión se le unió un componente inesperado: la posibilidad de capturar aves paleárticas para poder inferir sus poblaciones de origen. Las aves paleárticas migratorias trans-saharianas alcanzan su límite meridional en Sudáfrica y mediante el análisis de la huella isotópica de las plumas de los juveniles podemos inferir el lugar geográfico del nido, es decir, la zona donde ese individuo se desarrolló.