Las aves esteparias se han visto afectadas por la simplificación de su hábitat que produce el método actual de explotación agrícola. Igualmente, el desarrollo de las energías renovables implica disminución del hábitat disponible para estas especies.
Las administraciones competentes en biodiversidad tratan de proteger esta fauna, lo que genera limitaciones a agricultores y promotores energéticos. Se plantea, por tanto, la pregunta de si es posible compatibilizar la presencia de estas aves con el desarrollo económico, coexistiendo y generando oportunidades de desarrollo local.