La cría en cautividad de grandes águilas sin parentales biológicos, con el objetivo de reinsertarlas en la naturaleza, es un proceso que, lejos de ciertos mitos, entraña riesgo y no poca dificultad sujeta a unas metodologías variables que vienen determinadas en gran medida por la edad de ingreso de los ejemplares.
Álvaro Guerrero, miembro fundador de Acción por el Mundo Salvaje (AMUS), analiza metodologías de cría y manejo en ausencia de padres reales. El objetivo es reinsertar individuos sanos (física y psicológicamente) con garantías de adaptación en un medio atestado de peligros.
AMUS, constituida en 1995, se dedica a la recuperación y conservación de especies amenazadas en el propio territorio y desde un hospital de fauna salvaje.